lunes, 15 de abril de 2019

María Elena, región de Antofagasta , Chile











María Elena, región de Antofagasta , Chile
El pueblo es el único de Chile que tiene sus calles distribuidas según el diseño de la bandera del Reino Unido y debe su nombre a Mary Ellen Comdon, esposa de Elías Cappelens, el primer administrador de la planta.
Su nombre original era Coya Norte y fue inaugurada en 1926.
María Elena. ubicada a 1.250 msnm de altura y a 220 kilómetros al noreste de Antofagasta, esta Oficina fue fundada en 1926 por la Compañía Salitrera Anglo Chilena . Este es el único centro salitrero en actividad en Chile y el único centro productor de nitrato sódico natural del mundo.
Estas oficinas implementaron el concepto de “ciudad ideal”, con un trazado octogonal, cuyo centro era la plaza, lugar donde se concentraba gran parte del equipamiento público: canchas deportivas, piscina, baños públicos, teatro, clubes sociales, pulperías, iglesia, hospital, escuelas, estación de ferrocarril, correos, biblioteca.
Aquí visitamos la tenencia de carabineros. Se llama así porque la oficinas estaban al mando de tenientes. Pero aquí en María Elena hay al respecto una curiosidad. La oficina nació en 1926 como una fuerza de orden y seguridad, recién al año siguiente nace el conocido cuerpo de carabineros
El 27 de abril de 1927, el general Carlos Ibáñez del Campo, en su calidad de vicepresidente de Chile, firmó el decreto con fuerza de ley N°2.484, que fusionaba los servicios policiales y carabineros, formando una sola institución llamada "Carabineros de Chile".
Es decir nació antes del cuerpo de carabineros, pero aun queda otra curiosidad, se le llama tenencia porque está a cargo un teniente. Cosa que en María Elena no paso hasta hace solo una semana que asume por primera vez un teniente como jefe de la tenencia. El teniente Maickel Jara Berrios
Maickel nos invita a recorrer la tenencia, gran parte convertida en museo por ser la mas antigua del país. Nos visita en nuestra casa camión y como ya es costumbre intercambiamos obsequios.
También nos visita una vecina que nos regala unos hermosos cardos de recuerdo del desierto mas arido del mundo. Agradecemos su hospitalidad, con la promesa de regresar.