miércoles, 17 de abril de 2019

Chug Chug Geoglifos. Desierto de Atacama. Chile.


                                 CHUG CHUG      Geoglifos. Desierto de Atacama. Chile.
Los geoglifos son un tipo de arte rupestre que consiste en el uso de la superficie terrestre como soporte para la construcción de imágenes de gran tamaño y visibles a larga distancia. Son una manifestación poco frecuente en el mundo, con unos pocos ejemplos en Gran Bretaña, Australia, Estados Unidos y la Península Arábiga, destacando ampliamente a nivel mundial el desierto andino de Chile y Perú. Los más conocidos son los de Nazca, que son Patrimonio de la Humanidad, sin perjuicio de que tanto en Chile como en el Perú existen cientos de otros sitios de geoglifos de similar valor patrimonial, que merecen atención y resguardo.

Junto al Cerro Pintados en la Región de Tarapacá, Chug-Chug es uno de los dos conjuntos de geoglifos con más cantidad figuras en todo Chile y consta de un amplio repertorio iconográfico de motivos geométricos, animales y humanos: chacanas, diademas y círculos concéntricos se pueden apreciar a la par de camélidos, lagartos, aves, peces y otros animales representativos de los distintos pisos ecológicos del desierto (puna, quebradas y salares, pampa y costa). El conjunto lo completa una sugerente variedad de figuras antropomorfas, representadas con distintos tipos de técnicas, formas y grados de complejidad, con las cuales se evidencia que desde tiempos prehispánicos el desierto fue un espacio de gran diversidad social y cultural.
Estas grandes figuras son el gran libro que nos heredaron los antiguos atacameños, tarapaqueños y costeros que se movilizaron por el Desierto de Atacama.
La Fundación Desierto de Atacama trabaja en investigación, conservación y puesta en valor de los geoglifos del norte de Chile, un patrimonio de excepción a nivel mundial y que debemos preservar para las generaciones futuras.
Si bien las condiciones climáticas y geomorfológicas del desierto de Atacama permitieron que la mayoría de estas figuras se pudieran preservar casi intactas hasta nuestros días, a contar de la década de los noventa se ha producido un gravísimo deterioro patrimonial ocasionado por el ser humano, principalmente por tres vías:
Las actividades de turismo informal, cuyos efectos pueden verse en los senderos peatonales que, sin ninguna planificación, han sido trazados directamente sobre las figuras, así como también en las distintas inscripciones elaboradas sobre éstas (sobrenombres, dibujos, etc.), además de basura.
La instalación de torres de alta tensión para alimentar la actividad industrial minera de la zona, con efectos directos y muy negativos sobre el valor paisajístico del área.
El paso de rally motorizados que han dejado huellas imborrables sobre las figuras y sitios arqueológicos colindantes.
Con el fin de enfrentar estas permanentes amenazas, como Fundación estamos trabajando en la creación de un Parque Arqueológico para la investigación, conservación y puesta en valor de la zona de geoglifos de Chug-Chug, junto con el Consejo Autónomo Ayllus Sin Frontera, la Comunidad Indígena Aymara de Quillagua y la Comunidad Indígena Atacameña de Chunchuri. Conjuntamente con estas organizaciones hemos conformado la Mesa Intercultural Parque Arqueológico Chug-Chug como plataforma para sostener social y científicamente el proyecto y estamos solicitando al Ministerio de Bienes Nacionales que declare el área Bien Nacional Protegido.
Hemos implementado un campamento de investigación y monitoreo permanente, donde pernoctar y contar con los suministros básicos de subsistencia, junto a un mirador para orientar a los visitantes sobre los contenidos y el valor patrimonial del sector. Ambas estructuras son intencionalmente livianas y desmontables, pensadas con el objeto de no afectar el lugar y de cara a que en el futuro pueda implementarse una infraestructura más consolidada, aunque igualmente respetuosa del entorno.
Conseguimos que el área fuese considerada en la lista 2016 World Monuments Watch de 50 sitios patrimoniales emblemáticos en peligro a nivel mundial (a la par de sitios de la envergadura de Petra en Jordania o el Parque Chapultepec en México) y sumamos en este proceso el apoyo del Consejo de Monumentos Nacionales. Paso a paso vamos avanzando en la defensa y valorización de este frágil acervo del cual somos todos coherederos y responsables de su preservación. fuente  Fundacion desierto de Atacama