jueves, 24 de octubre de 2019

Mal Abrigo. un abrigo al corazón

 Hace un par de años conocimos a Alejandro Waterston durante un paseo por Sierras de Mahoma en el departamento de San José, aquí en Uruguay. Son denominadas así en honor a Ohma, el nombre que utilizaron los españoles para referirse a un indio que habitaba esos lugares durante el período colonial. El lugar es ideal para treking, kayak, bici, y pasar una linda tarde conversando con gente de aquí.



Alejandro vive en Mal abrigo.
Decidimos pasar a visitarlo.
Desde el año 2013 el Uruguay organiza un concurso de pueblos turisticos
El premio, dirigido a pueblos de menos de 3.000 habitantes, fue instaurado por el Ministerio de Turismo que persigue promover proyectos de "desarrollo local que impulsen la diversificación de la oferta turística" aprovechando los "atributos patrimoniales y ambientales propios de la localidad y su entorno"
Hoy Mal abrigo esta declarado pueblo turístico.
Lo llamamos y nos vista en nuestra casa camión con su COMPAÑERA




Cristina, una gran mujer, emprendedora y aguerrida, y su hija Anaclara, ( si así todo junto, como lo escribiera Daniel Viglietti) que ha sabido conquistar un lugar más en nuestro corazón
Anaclara de
Daniel Viglietti
Con un grafo
ella escribe en las paredes "resistir",
bufanda rojinegra por la espalda,
minifalda,
Anaclara.
Borra infancia
aprendiendo en bellas artes a crecer,
con pechos de rosales sin espinas,
agua marina,
Anaclara.
Es de agua
cuando el hijo se enamora de la sed
y si el niño le regala una amapola
llora sola,
Anaclara.
Nunca encuentra
porque busca siempre el modo de no hallar,
aunque sabe que lo nuevo se conquista,
anarquista,
Anaclara.
Si la hieren
de tan tierna tiene miedo de morir
y entonces pone espinas en las rosas,
temerosa,
Anaclara.
De mañana
va tejiendo los telares de la duda,
aún desnuda preguntándole al espejo
un consejo,
Anaclara.
Hospitales
que conocen la dulzura de sus manos,
los dolores con mirarla ya se olvidan,
fisiatría,
Anaclara.
Si el camino
Anaoscura siempre claro quieres ver,
nunca dejes,
Anaclara, tu locura compañera,
tu locura de palomas casi halcones,
tus pasiones,
Anaclara.