sábado, 19 de octubre de 2019

el nacimiento de Lequetan . Nuestra inspiradora Sophie Chacoux


Hace muchos años llega a nuestra ciudad un velero.

El diario local publica llegó a la ciudad una mujer francesa navegante en el mundo. La noticia daba vueltas en la cabeza y quisimos conocerla.
Como ella hoy recuerdo con muchas risas, “era un gato salvaje”, debía defenderse de cualquier posible acoso en puerto, una bella mujer y “solita”, no fue fácil llegar a su corazón, pero la tercera es la vencida.





Y si tres veces hasta que hoy dice ser nuestra hermana de mar. Y asi lo sentimos
Sophie, francesa, navegó desde pequeña gracias a que su padre era Contra Almirante de la Armada francesa, quien le enseñó los secretos y el amor por el mar. También navegó de la mano de su tío, oficial de la Armada. A los 16 años ya había dado dos vueltas completas al mundo despertando en Sophie esa atracción por los misterios del mar y la navegación.
Trabajó en Arcachon entre una mezcla encantadora de influencias marítimas y gasconas, con sabor a España, luego, en la Fundación del Dr. Albert Schweitzer (Premio Nobel de la Paz 1952) como médica interna en el hospital de Lambarene al oeste de Gabón, también trabajó en una empresa maderera en Gabón “con los pigmeos”. Se desempeñó en el cargo de Directora de Marketing en hoteles de África y en la isla de Madeira. Escribió varios libros en francés con gran éxito en el mercado, traducidos por la mamá del lequetan al español.
Hasta que un día decidió vivir en ese mar que la apasionaba, y se compró el ENOMIS convirtiendo su barco en su hogar navegó “solita” el Mediterráneo, las islas del Atlántico Norte en las Baleares, las Azores, Madera, Cabo Verde, Canarias y Marruecos.
Cruzó el Océano Atlántico desde Palma a Recife, recorrió Brasil, el Río Paraná y el Uruguay.
Cuando arribo a Mome nació la amistad, compartimos charlas, asados, amigos como Harvey “el mágico”, Ramón, capitán de veleros que vive en Viedma Argentina, Jhon Rene, hoy por Francia en su velero dando vueltas por el mundo, Wenalis, hoy en Brasil y un gran número de personas y personajes porque cada uno es una vida intensa.
De todos ellos aprendemos que hay otra forma de vivir, de encarar las cosas, que nada se precisa para ser feliz. Y todo ello se lo debemos a Sophie. Ya 12 años dando vueltas sin parar. No en velero, pero como repitió una y otra vez “tu barco el Lequetan”, hoy vinimos a visitarla a Villa de Soriano, donde decidió anclar y llevar adelante un valioso proyecto turístico, atrayendo a turistas internacionales a su casa Chale Alto.