martes, 20 de septiembre de 2022

LA LUNA MAS LINDA DEL MUNDO ES PLATENSE

El segundo mejor billete del mundo tiene su imagen de una fotografía platense La Jaguar Luna

El Banco Central de la República Argentina tomó la decisión de imprimir nuevos billetes. De este modo se llamó a un concurso fotográfico de los animales autóctonos para que sean homenajeados en la moneda, del mismo modo que ocurre en Canadá.
 Una de las instituciones participantes fue el Bio Parque de La Plata, quienes gustosos aportaron las imágenes de Juan y Luna. Y justamente ella fue la gran ganadora de la jornada. 


Fue electa para encabezar al billete de mayor valor del momento ($500).

 Según el BCRA, la selección del yaguareté como figura representativa “se debe a que es considerado Monumento Natural Nacional, una de las categorías más importantes en términos de preservación, ya que se encuentra en peligro crítico de extinción. Se estima que pueden encontrarse solo 250 ejemplares en nuestro país”. En el anverso del billete, diseñado con formato vertical, puede verse el retrato de la yaguareté (Luna). Si bien no tiene su nombre escrito, la distribución de sus manchas funcionan a modo de sistema de identificación porque se trata de un patrón único e irrepetible. Su reverso, diseñado con formato horizontal, recrea una imagen de la selva, su hábitat natural. En el ángulo inferior izquierdo, una podemos ver otro pequeño ejemplar haciendo un guiño de ojo "a la niñez", en la búsqueda de la concientización de las nuevas generaciones. A lo largo del tiempo, este billete fue galardonado con los Premios Nexenum y LatiNum. Por si no fuera poco, también se transformó en el segundo mejor billete del mundo según la International Bank Note Society (IBNS) por su mérito artístico, diseño, uso de colores y medidas de seguridad.
Se cumplieron poco mas de 115 años de la fundación del conocido Zoológico de La Plata situado en el corazón del Paseo del Bosque, diseñado por Tays, hace ya dos años la Municipalidad de La Plata está en un proceso de reconversión del predio queriendo terminar con la antigua forma de encierro de las especies buscando un perfil educativo que se enfoque, fundamentalmente, en el cuidado del medio ambiente y el cuidado de la fauna autóctona. El zoo se cerró al público hace cuatro y medio aproximadamente.
Fundado en 1907 y diseñado bajo un estilo victoriano,
 la parquización de sus 17 hectáreas estuvo a cargo del ingeniero agrónomo Antonio Lanteri Cravetti. El primer director y principal impulsor fue Alfredo Plot, quien diagramó la distribución ambiental. Además donó su colección personal de aves y se mudó al predio durante su gestión. Con la llegada de su sucesor, el naturista Carlos Marelli (1918/40) el parque inició una transformación que lo convirtió en el segundo zoológico más grande e importante del país. No solo por la incorporación de nuevos animales sino también fue el puntapié para la creación de un magnífico Jardín Botánico

Yaguareté significa “la verdadera fiera” en guaraní. Algunos le dicen jaguar o yaguar. Otros, tigre americano, por ser su homólogo aquí en america latina.
Antiguamente sólo en los Esteros del Iberá, en Corrientes, estos bellísimos animales supieron superar los mil ejemplares. En Misiones concretamente, quedan unos doscientos. La mano del hombre, cuando no, los puso al borde de la extinción en nuestro país. Es por ello que cobra tanta relevancia el hecho de que en el corazón del Bosque platense, en el ex Zoológico, viva Luna, una jaguar, Se trata del tercer felino más grande del mundo, por detrás del tigre, y del león. En los Esteros del Iberá (aguas brillantes en guaraní), un maravilloso humedal de unos 12.000 kilómetros cuadrados, la caza furtiva y las escopetas de los hacendados para defender a sus vacas los eliminaron hacia 1950. Desde la ONG ecologista Rewilding Argentina, que trabaja en estos días en la reinserción de cinco yaguaretés en ese lugar, contaron que “durante el auge de la demanda de pieles, en Europa se llegó a pagar hasta 10.000 dólares por animal cazado en el Iberá”. Por ser una de las especies en peligro de extinción más amenazadas del país, el “rey de las selvas americanas” fue declarado Monumento Natural “para resguardar su ambiente y evitar su caza furtiva, principales factores que atentan contra su conservación”. Pero todos saben que la pelea contra los depredadores de la naturaleza es día a día.
Hoy Luna es la Yaguareté más Famosa de La Plata llego en el 2015 con solo 7 años y su compañero Juan de 15 años. Ambos fueron rescatados del “Zoológico de Florencio Varela” (privado), el cuál fue clausurado por graves fallas de seguridad. En el año 2016 el Zoológico de La Plata inició su transición al esquema de “BioParque”. Esto implicó que los nuevos habitantes pudieran vivir en habitat semejante a lo que sería una vida silvestre: gruta, plantas, cascadas, espejos de agua y calefacción. Posteriormente, tras el deceso de la Elefanta Pelusa, se decidió que el predio debería ser cerrado hasta que se completen todos los cambios. De este modo, ambos felinos entraron al programa de protección, preservación y reproducción de especies autóctonas en peligro de extinción ,Los Reyes de las Selvas Americanas. La Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza considera a los yaguaretés en un nivel NT (Casi Amenazado) tras identificar una reducción del 25% de la población en tres generaciones (21 años) en todo el Continente. Los principales riesgos son la reducción del hábitat, los conflictos agropecuarios y a caza ilegal en algunos países. En Argentina solo subsiste en pequeñas regiones de Misiones, Formosa y Salta. Mediante los programas del ecoturismo se intenta reducir la matanza de los felinos cuándo estos atacan al ganado. Además su caza esta penada con multas de 50 millones de pesos y la comercialización con clausuras de locales por 5 años. Lamentablemente estas medidas no son replicadas en toda la región. En Brasil aun existe la “caza restringida” y en Bolivia la “caza deportiva” para esta especie
Según un estudio sobre Bosque Atlántico del CONICET, los yaguareté podrían desaparecer dentro de 50 años. Por esto mismo son muy importantes los programas de preservación, protección, visibilización y reproducción. Aunque la vida en cautiverio, como es el caso de Luna, pueda parecer cruel, es una herramienta vital para frenar una nueva extinción.

 La vida silvestre está estimada entre 10 y 12 años, mientras que en cautiverio pueden alcanzar los 20-25 años. Si bien la etapa de fertilidad comienza después de los 36-48 meses de vida, aun resulta muy difícil emparejar las especies. El caso de Tania y Chiqui, padres de 2 crías, este fue el resultado de un proceso de 7 años para la Fundación “Rewilding Argentina”. Lamentablemente “Juan” falleció el 23 de diciembre del 2020 a los 19 años como consecuencia de su longevidad; acompañado por sus cuidadores, el cuerpo de veterinarios y profesionales de la Facultad de Veterinarias de la UNLP. Como consecuencia de la edad padecía problemas de movilidad y gástricos/renales. Continuamente fue atendido con suplementos vitamínicos, antiartríticos y calmantes. Por su parte, Luna ya tiene 14 años y vive resguardada del público bajo el cuidado de veterinarios especializados. El BioParque de La Plata. Siendo el mayor predio del país, se encuentra cerrado al acceso público desde el año 2017. Esa fue una medida del gobierno municipal, luego del deceso de la Elefanta Pelusa, 

para garantizar y acelerar la liberación de los animales aptos para vivir Reservas Naturales especializadas.
Al inicio del año 2016 el predio contaba con más de 120 especies de animales, 
en su mayoría de origen sudamericanos, y una variedad de 280 árboles y plantas.

 Finalizando el año 2021 estas cifras se redujeron a menos de la mitad con la liberación de los leones Mansa y Melena, la tigresa Colón, el puma Jerry, la familia de lemures, los ciervos, el lobo marino Nereo, las 23 ovejas de somalia y muflones, y 57 aves periformes; entre muchos otros ejemplares. De momento quedan unos 50 animales para ser liberados. Mayormente son ciervos que viajarán a Entre Ríos. Por su parte el hipopótamo Hipólito que se mudará a la Reserva Carlos Pelegrini.
En contrapartida, cerca de 500 animales se quedarán por diferentes motivos. Cerca de 140 flamenco, 60 guacamayos, la osa hormiguera (Gigi), el mono araña (Danielito), los Yacaré (Tyncho y Santi), los ñandues, algunos carpinchos y las llamas son consideradas como especies autóctonas aptas para programas de conservación local.
Un caso muy particular es la yaguareté Luna (13) que participa en proyectos genético por ser una especie amenazada de extensión. Ella vive en uno de los hábitat más modernos del país rodeada de un minibosque, una gruta y cascadas de agua. Además su rostro fue inmortalizado en el billete de $500. Tristemente su hermano Juan, quien fue rescatado de las malas condiciones de otro zoológico, falleció a la avanzada edad de 20 años (en libertad viven entre 10 y 15 años).
Por su parte el Papion (Nelson), 

las pumas (Ana y Norma) y 15 monos (carayá, tití pincel blanco y tití pincel negro) se encuentran muy apegados a sus hábitat y cuidadores; en consecuencia no reaccionaron favorablemente al proceso de liberación. Algunos de ellos pasaron a una etapa de enriquecimiento para volver a intentar una futura liberación. Mientras que finalmente los cóndores (Kuntur y Pacha), la águila (Sofía) y el oso de anteojo (Frenk) no pueden obtener su libertad por su longevidad.

Como política institucional el BioParque/Zoológico siempre tuvo un fuerte compromiso con el rescate, cuidados y reintroducción de animales exóticos. "María Alicia" fue una de las tigresa de bengala. Ella fue rescatada y salvada de un circo clandestino donde tras pasar una cruel hambruna fue atacada por dos leones perdiendo una pierna y la cola. El chimpancé Tomy es proveniente de un circo brasilero, quien lo regaló porque "no quería trabajar". Lamentablemente no puede ser liberado porque se volvió muy dependiente de los cuidadores. Otra triste historia ocurrió en el año 2013 cuándo fue abandonada una tortuga marina (chelonia mydas) en peligro de extinción. Inmediatamente fue atendida por los veterinarios del predio por la precariedad de su salud. Una vez fuera de peligro fue liberada en una reserva natural. Lo mismo ocurrió con el Puma Jerry, quien apareció en la localidad de Maipú.

A lo largo de todo el predio también existen pequeñas joyas escultóricas como fuentes de mármol, representaciones de animales, la imagen de San Francisco (protector de la naturaleza) y tallados en madera reciclada. El paisaje se completa con la presencia de dos inmensos lagos alimentados por un arroyo entubado y un trencito que recorre gran parte del predio.





Además la Institución se consolidó como un lugar referente de rescate, estudio, rehabilitación, reinserción y reproducción de animales exótico autóctonos. A principios del 2022 el gobierno municipal anunció que se está trabajando en la próxima reapertura parcial del BioParque.
 Esta habilitaría espacios educativos sobre los antiguos residentes, pero no se permitirá el acceso a las áreas con animales para privilegiar su seguridad y tranquilidad, aun sigue cerrado al publico en general