Por fin Bolivia. País
desconocido por nosotros
. todo por explorar.
La aduana dice que abre a las
7 de
la mañana, pero no empiezan
a atender hasta más de las 10. Camioneros
haciendo fila con sus papeles para cruzar. Gente esperando. Finalmente abren la ventanilla.
Distintas costumbres, distinto idioma, distinta comida, distinta vestimenta,, distinta forma de manejar, distinto
clima, distinta altura, distinta… todo distinto.
Hay
que adaptarse a todo.
Muy rápido hay que adaptarse
porque si no lo llevan por delante a uno. Los
autos, no hemos visto autos
particulares en la zona alta y árida de Bolivia, son todos vehículos de pasajeros, todos tocan
bocina a la vez,
todos pisan el acelerador y manejan
haciendo finitos
de película
Cruzamos prácticamente a paso de hombre
Villazón hasta que llegamos a
una hermosa plaza con oficina
de turismo.
Buscamos asesoramiento, como están los caminos? Cuales
son las
rutas que mas convienen? Distancias?
Todo es distinto.
las distancias no se miden en Km. si no en tiempo. Las
rutas están buenas, recto no más, plano ,plano,
Pero si no, podes tomar excursiones
que salen desde ahí hasta Uyuni, las mismas
en
4x 4 con esos demonios
por
conductores.
Preferimos posponer la visita a Uyuni e ir por lo que nos
parecía mas seguro y tomamos la ruta a Tupiza, la joya de Bolivia. En los mapas figura de ripio, pero es
asfaltada.
Primer pueblito que vemos a la vera del camino Mojo
con una iglesia que
data de más de 300 años. 30 casuchas y nadie a la vista. A lo lejos cuatro pequeños y un joven
corren en nuestra dirección, están ávidos
por
atendernos y nos
abren la iglesia para que podamos
visitarla. Ni cura hay, este viene cada mes y
medio a dar su misa.
En el camino Suipacha donde se libró la famosa batalla
Rendimos nuestro homenaje y seguimos a Tupiza. La ruta continua buena aunque con muchos huellones
de los
camiones.
Tupiza es una ciudad bastante
prolija, recorremos
su
mercado central de dos manzanas de tamaño. El mismo esta ordenado
por rubros, un pasillo zapatos,
otro ferretería, otro frutas y verduras
y el ultimo yuyos medicinales, donde me asombro ver colgados cabritos
pequeños disecados, monos, corderitos, patas de cabra cabezas
de cabra, que los venden
para los rituales a la pacha. Impresionables abstenerse de visitar ese pasillo. Recorremos la plaza, visitamos
el
ciber porque no encontramos
zona wifi
Dormimos estacionados en la puerta de la casa del doctor
Wilde.
Los carteles
de escuela en todo Bolivia son los
niños corriendo y es porque
aquí los niños van corriendo
a la escuela y no como en argentina
que van caminando
y de la mano de un adulto.
Ramadas, Chibchas Vitichi, Molle Grande
Juegan el camino y el rio en el horizonte
Llegamos de noche a Potosí