sábado, 20 de enero de 2024

Historia de una cruz en la Sierra de Velazco, la costa Riojana


En Santa Vera Cruz 

En el año 1949 se colocó una gran cruz en la cima de la Sierra de Velazco, allí en la costa riojana.

La costa, como es conocida, no tiene playa, ni mar, ni laguna, ni rio, ni siquiera costea  un arroyito. Se llama así,  porque va costeando los cerros. 

Una sucesión de 10 pueblitos encadenados. 

Saliendo desde la Rioja Capital después de curvas y contracurvas sinuosas atravesamos dos  túneles iluminados,  el nuevo y el viejo, como les llaman para dar con la vista panorámica del dique Los Sauces.

 Más adelante Sanagasta, pueblo de negros donde se encuentra la imagen de la Virgen Negra traída allá por el s. XVII, aquí rebosa de verdor ya que se encuentra en el valle del río Huaco. Y se puede visitar el parque Geológico donde se hallaron elementos de particular valor geológico y paleontológico, entre ellos nidos y huevos de dinosaurios y La Cueva de las brujas

Continuamos el recorrido pasando por las Peñas, donde se encuentran las piedras preñadas, que quiere decir? Como su nombre lo indica, una piedra tiene otra dentro, podría tratarse de granito orbicular, pero aún no se ha determinado. También es zona de morteros y pinturas rupestres. Aguas Blancas, donde está la Bodega Casa India, que elabora vinos artesanales cien por ciento orgánicos.

 Pinchas , dónde vive nuestra queridísima amiga Doña Ramona Frescura, excelente Telarista y recopiladora de historias del lugar, donde en su patio bajo la gran parra, alberga en su corazón muchos amigos durante las chayas.

Chuquis, quien tiene la hermosa cascada Yacurmana con un treking de dificultad alta.

 Aminga, cabecera del departamento, típicas quintas de naranjos, nogales y palmares y  el vinito Febrero es excelente. 

Anillaco, con la rosadita, la bodega San Huberto, su iglesia fuera del eje de la ciudad, el automóvil club allá al fondo con una linda hostería, el criadero de esturiones.

 Los Molinos obteniendo su nombre de los antiguos molinos harineros, vestigios que demuestran en su plaza con las antiguas piedras circulares.

 Anjullon donde son muy famosos y sabrosos sus alfajores de turrón.

Y… llegamos a dos pueblos muy peculiares en sus construcciones, casi todas las casas son de piedra, pero no de pirca, si no piedras talladas a mano, como enormes ladrillones. Es que aquí aun existen los picapedreros como el tío  Marcial, que de sus robustas manos como raíces salen hermosas notas musicales de su acordeón.

Y como todo pueblo se levantaron las iglesias,  y las casas alrededor de estas,  y se eligieron sus nombres; se llamarían: San Pedro y más arribita, allí, subiendo el cerro, San Pablo. 

Se organizaron rifas, fiestas, kermeses y hasta bailes para recaudar dinero para las esculturas de los santos de las iglesias. Estos se encargaron a la ciudad.  

Cuando los santitos  llegaron, San Pedro paga el suyo  y San Pablo no tenía el dinero; parece ser que alguien había tomado indebidamente prestado tal asunto. 

El pueblo enojado increpa al párroco del momento,  este apurado y astuto los frena cruzando dos simples leños, y habla así: “esta es la verdadera cruz”  y de ahí es que llegamos a Santa Vera Cruz, y ya nos se llamaría San Pablo, el pueblo construido de piedra cortadas por picapedreros, elegido por Dionisio para construir su vivienda, la que luego se transformaría en el famoso castillo.

Pero hoy hablaremos de la cruz que esta allá arriba en la puntita de aquel cerro. El de la derecha, el más cónico, el más alto. ¿lo ve? . aquel brillito como estrella durante el día.

Desde abajo cuando le pega el sol la vemos brillar blanquita y tan lejana que parecería imposible alcanzarla.

Parecería. Pero no!. Porque Pedro, dueño y señor  del Castillo de Castillo De Dionisio, humilde montañés como él se autodenomina , único habitante de esta magnífica obra declarada como el 6to lugar más exótico del mundo  para vivir y  única obra estilo Gaudiana fuera de Barcelona,   realiza permanentemente  treking con guías de montaña y todo lo necesario para que sea una experiencia inolvidable, donde se puede pasar por las condoreras o visitar la antigua calera,  las cascadas frescas, y realizar ejercicios de yoga bajo la mágica melodía de los cuencos. También podemos ir hasta la cruz las noches de luna llena.

Esta cruz fue colocada allá en la altura desde ese entonces, se mantiene,  soporta los vientos, las nevadas, el zonda y el sol intenso iluminando y protegiendo toda la región.

Gracias amigo  Twky Danielitoalberto Peraltta por contarnos su historia 

aqui Don Marcial deleitandonos con su musica. Haciendo clic sobre el video podran escucharlo y conocerlo.

https://www.youtube.com/watch?v=opS8lRNOUz4